
20 aniversario DE
RIMAVAGÜE
م
Enero
8 SALIDA:
8'30
PARADA EN:
MOREDA
Montañeros de de RIVAYAGUE SOCIO: 675
NO SOCIO: 800
En la serie dedicada al concejo
de ALLER…
Ruta de
las majadas
Cuevas-La Tabierna-El Otero
La Valencia-Felechosa

La AGRUPACION DEPORTIVA RIVAYAGÜE y sus patrocinadores se eximen de cualquier responsabilidad ante excursionistas y subsidiarios de los mismos, que participen en sus actividades sin tener LICENCIA DEPORTIVA FEDERATIVA, advirtiendo que estos actúan bajo su exclusiva responsabilidad.
PERFIL DE DESNIVELES
Salida: CUEVAS
Collada Felguerina
El Llanón
Las Tabiernas
El Otero
Collada la Felguerina
Llegada: FELECHOSA
FICHA TÉCNICA
Distancia EM. 13’5
Desnivel ascenso. 620
Desnivel descenso. 749
Tiempo medio/horas 540
Llámanos…
Recuerda que tienes que reservar tu plaza.
RIVAYAGÜE Menéndez y Pelayo, 2 Tlf.: 528 46 50 LANCIA FIAT ALFA ROMEO
Concesionario Oficial

ALLER, tiene historia y tiene paisaje
Está a la vista. El concejo de Aller es desde siempre «muy montañero». Cargado de contrastes, de valles y montañas muy conocidas, de hayedos y robledales, y de puertos como San Isidro, Vegarada y Piedrafita, en los que la Cordillera Cantábrica eleva numerosas cimas muy frecuentadas por los montañeros.
El concejo se sitúa geográficamente en el sur del Principado, teniendo como límites por el norte a los de Laviana y Mieres. Por el sur, tiene a la provincia de León y los puertos de montaña antes mencionados. Al este, le escoltan Caso y Sobrescobio, y esas cumbres que podéis observar en el dibujo de arriba: Peña Mea, La Forcada, el Cuchu y el Retriñón.
El concejo de Lena, lo tiene situado a su oeste, por el cordal de Carrocedo.
Aller, es cruzado en su valle central por el río Aller, que nace en el puerto de Vegarada y recibe en Collanzo las aguas del río San Isidro que bajan de ese puerto, y más adelante, por el oeste, se le unen las aguas del río Negro.
Podemos distribuir a sus gentes en ocupaciones que van desde la agricultura y ganadería (35%), a la minería (43%) y en otras industrias y servicios al resto de la población (fabricación de embutidos, cerámicas, maderas, y recientemente en la nueva embotelladora de aguas minerales de Cuevas).
Como en la mayoría de los pueblos asturianos, existen refranes que de alguna manera intentan definir el talante de sus gentes, y en Aller, hay uno referido a la «torpeza de sus gentes» que dice: «ENTRE TOOS LOS DE ALLER, NON FAEN UN BURRU BEBER» y este otro que dice: «DE ALLER, NI VACA, NI MUYER, NI BURRU,… SI PUE SER»…
De su historia, Aller cuenta antes de la era cristiana con la llegada de los romanos, dejando muestra de su paso, en una vía por entonces militar que venía por Vegarada a Río Aller, y continuaba hasta el concejo de Laviana, construyendo recios puentes, que aún hoy, alguno de ellos hace servicio. También existen restos como un casco de cobre, un juego de instrumentos religiosos paganos, y gran cantidad de monedas de plata, anteriores a la época de Tiberio. Cien de estas monedas fueron halladas en una peña cercana al pueblo de El Pino, y otras ciento sesenta dentro de una ánfora, en el pueblo de Santibañez de Murias.
POR LOS «MAYAOS» DE ALTURA.
Los «mayaos» como llaman a las majadas de los pastos de altura, donde existen rústicas cabañas, son sin duda una estampa del clásico asturiano, y ellas serán precisamente los escenarios de esta primera actividad del año, que bajo el título de «Ruta de las majadas» abre esta serie dedicada al concejo allerano, al que volveremos más veces durante este programa del 95.
La ruta, parte de la fuente de las Moyás, cuyas aguas desde siempre, muy apreciadas por los que venían al puerto, son ahora embotelladas en Aguas de Cuevas.
El camino se empina hacia el colledo de Cellero, pasando seguidamente por un bosque de hayas, y después cruza un puente y toma un sendero que sigue ganando altura y nos llevará a la zona de La Piornosa y poco más al noroeste la majada de La Tabierna, salpicada de fresnos, retamas y abedules.
Después las cabañas de la vega del Otero, al pie de la gran cima del Retriñón, y el continuar por verdes praderías que se extienden al pie de esa cima, hacia la collada de La Valencia, y por la de La Felguera, cambiar el rumbo en franco descenso por el valle de Fresnedo con hermosos rincones, y que tiene su final en el pueblo de Felechosa.
No hay duda que, si el futuro es el turismo, el concejo de Aller tiene buen porvenir. Esos paisajes que lo adornan entre montañas y verdes valles, conjugando la pesca en sus limpios ríos, y por supuesto con el ya mencionado Puerto San Isidro, al que llaman el Puerto de las Cuatro Estaciones, por ser frecuentado por muchas gentes en cualquier época del año, avalan ese cercano futuro.
En su fauna, el corzo, el rebeco, el jabalí y el lobo, y también en las aves, la perdiz y el faisán.